Resumen: ¿Sabes cómo realizar una tarea? Seguro que sí, pero, ¿sabes cómo hacerla en el menor tiempo posible?, aquí encontrarás algunas pistas. Aprender a trabajar inteligentemente te ahorrará mucho tiempo, que luego puedes dedicar a otras cosas.
reloj lectura yelLectura: 3 minutos, 46 segundos.

“Trabaja más inteligentemente, no más duro” – ¿Qué significa realmente este dicho antiguo? Cuando existen fechas límite que se acercan, jefes que miran encima de tu hombro y clientes listos para almorzar; ¿cómo te mantienes concentrado y logras tener listo todo a tiempo? ¿Cómo se supone que puedas producir resultados efectivos, aunque estás “bajo la mira de la escopeta”?

Algunas veces sabemos qué es lo que hay que hacer, pero nos distraemos, nos sobre-comprometemos y con esto atrasamos nuestros plazos, sumando a la vez más cosas que hacer en menos tiempo. Al ir a ese ritmo, “freirse la mente”, enfermarse y cansarse es muy fácil. Lamentablemente cuando esto ocurre no logramos hacer lo que necesitamos.

Requerirá poder de voluntad, fortaleza y concentración láser para trabajar más eficientemente, y a su vez, evitar “quemadores de tiempo” puede dejarte con más tiempo para disfrutar de los frutos de tu trabajo.

Estos 10 consejos te ayudarán a trabajar más rápido y más inteligentemente.

1. Estructura lo que tienes que hacer

estructura piramide

Planificar, usar herramientas de productividad y agendar tareas en tu calendario puede ayudar mucho. Prográmate para el éxito fragmentando las tareas en trozos más manejables, para que sepas qué es más importante hacer primero y aún tener el tiempo de cuidar de ti mismo; comer bien, ejercitar, relajarte, etc. Sin auto-cuidado, perderás eficiencia al estar trabajando en exceso.

2. No entres en modo “multi-tarea”

pulpo multitask

Existe una ilusión de que hacer muchas cosas al mismo tiempo es productivo. Pero en realidad, te deja la mitad de concentrado y constantemente cambiando de ritmos. Puede que tengas una sensación de que nunca completas las tareas de esta forma. Define un temporizador y trabaja a tus propios tiempos con intervalos de descanso. Por ejemplo con la técnica pomodoro trabajas 25 minutos y descansas 5. Otros trabajan por 90 minutos en una tarea o se enfocan en ella hasta que sea completada, para luego descansar y ocuparse de otra tarea.

3. Urgente no necesariamente significa importante

urgente

Lo que alguien más crea que es urgente puede generar un pánico que radica en complacer a esa persona. Si sabes que no es importante, entonces prioriza y haz lo que sea más importante primero. Tu mismo sabes qué es lo que va primero y cómo lograrlo. Así que escucha a tu consciencia.

4. Apágalo

apagalo

Apaga ese teléfono, desactiva las notificaciones o programa una respuesta automática si necesitas, pero desconéctate para evitar distracciones. Podrás hacer más en el mismo tiempo si te concentras en una tarea prioritaria y respondes las llamadas perdidas y notificaciones una vez que hayas terminado.

5. Toma descansos

descanso

Levántate, muévete, sacúdete. Los dolores de cabeza y dolores oculares pueden ocurrir luego de extensos periodos frente a la pantalla del computador. Sal afuera por una caminata rápida para volver con más energía y más refrescado.

6. Política de la puerta cerrada

puerta cerrada

¡Escóndete e hiberna! (Al menos un rato) La gente entrando y saliendo de tu oficina crea detenciones y pausas en tu productividad, ya que tienes que volver a concentrarte en la tarea cada vez. Define horarios reales de oficina y haz que el resto los respete.

7. Tus ojos en el premio

eyes on target

Recuerda la meta – hazte una imagen global. Concéntrate en cuán genial se sentirá lograr la tarea. Estás en tu camino si tomas acción. Quedarse concentrado en el resultado final puede recordarte esa visión con altura de mira, así que las piezas poco importantes del trabajo o tu perfeccionismo enfermizo no te podrán detener para llegar a la gran meta.

8. Celebra las pequeñas victorias

gangnam style

Los proyectos requieren de muchos pequeños pasos hasta que se concretan. Fragmenta tu proyecto en pasos y celebra cada vez que logras dar esos pequeños pasos. En vez de culparte y deprimirte por lo que no has hecho aún, date un aventón y ánimo para continuar, esto te puede dar la confianza para ver de nuevo el final del camino.

9. Di “No”

di no

No te sobre-comprometas: cuando ya estás cerca de una fecha límite con un proyecto, no te apuntes con más tareas. Ponte un período de prohibición para decir “si” a cualquier cosa hasta que termines este proyecto. No dejes a la gente esperando, pero diles que estarás en contacto con ellos cuando termines. Salirte de la tarea actual hace que pierdas el foco y que te sientas presionado por lo que te queda por hacer.

10. Deja de decir “Estoy tan ocupado”

busy

Quejarse muy seguido lo único que logra es hacerte sentir – y al resto cerca de ti – peor. En vez de decir “estoy tan ocupado”, di “Estoy tan cerca de mi meta”. Esto te motivará para seguir adelante.

Autor: Bridget Baker
Artículo original
Traducido por Cristian Estrada