Resumen: Un buen descanso es la base para contar con la energía necesaria al día siguiente, pero muchas veces no logramos descansar por factores externos. Saber cómo resolver eso, es importante para poder conseguir un mejor descanso noche tras noche.
reloj homo eficiensLectura: 5 minutos, 22 segundos.

Nada comienza mejor el día que una buena noche de descanso. Pero por el otro lado, invertir horas moviéndose de un lado para otro en la cama e intentando conciliar el sueño, casi seguramente resultará en un comienzo lento para la mañana siguiente.

Está claro que dormir no es tan simple como dejarse caer en la almohada y cerrar los ojos. Tu cuerpo y mente necesitan estar preparados para entrar durante 8 horas en modo de descanso. Y resulta que muchos factores pueden jugar en contra de una buena noche de sueño, pero con el cuidado adecuado por ti mismo y el entorno correcto, puedes optimizar tus posibilidades de descansar mejor.

Pensar mucho

sobrepensar

Llevamos vidas agitadas – nadie lo pone en duda. Algunos de nosotros llenamos nuestro día con decenas, si no es con cientos, de responsabilidades y obligaciones. Así que tiene sentido que, cuando nos recostamos para dormir, nuestra mente comienza a recordarnos todo lo que se supone que deberíamos terminar de hacer antes de dormir por tantas horas. Desafortunadamente, cuando esto ocurre, nos sumergimos en un ciclo vicioso de pensamientos que hace imposible dormir. O incluso, si logramos quedarnos dormidos, algo en nuestros sueños hará que nos despertemos para ponernos a pensar de nuevo; haciendo imposible que entremos en fase REM, que es clave para conseguir un buen descanso.

Cómo solucionarlo

Para aliviar este problema de sobre-pensar las cosas, se puede comenzar usando mejor el tiempo durante el día. Procrastinar un poco de tiempo aquí y un poco allá puede no verse como mucho, pero si sumamos todos los pequeños tiempos, nos daremos cuenta que estamos dedicando mucho más del tiempo que pensamos en procrastinar. Intentar hacer lo que más se pueda cada día y dejar las tardes para relajarse, es de lo mejor que podemos hacer.

Si estos pensamientos se vuelven muy cíclicos, es bueno salir de la cama y caminar por un rato. Algunas veces el simple acto de sacarnos físicamente de un contexto puede ser de mucha ayuda para remover los pensamientos negativos que corren por nuestra cabeza.

Dolores corporales

dolor muscular

Conseguir una buena noche de descanso tiene mucho que ver con encontrar esa posición ideal de comodidad física para luego volar al país de los sueños. Claro que, si es físicamente imposible estar cómodo en primer lugar, será fácil darse vueltas y moverse hasta las 3 am. Un dolor constante de cuello o espalda puede interrumpir los patrones de sueño, o impedir que nos podamos quedar dormidos en primer lugar, sin importar cuán cansados estemos.

Cómo solucionarlo

Si generalmente nos encontramos saludables y con buen estado físico, el problema no está en nuestro cuerpo; está en nuestro colchón. La elección de colchón no debería ser tomada a la ligera; a fin de cuentas, es donde vamos a pasar 1/3 de cada día, por el resto de nuestra vida. Encontrar un colchón que sea cómodo para nuestro cuerpo, es clave para lograr un descanso que sea confortable.

Hábitos de descanso irregulares

desorden sueno

En los tiempos de Universidad, era fácil quedarse hasta las 2:00 am, despertar temprano y recuperar el sueño con una siesta corta, sin afectar luego los ciclos de descanso nocturno. Pero aunque cueste admitirlo, esos días quedaron atrás. Ahora, dormir hasta más tarde un domingo significa ir más tarde a dormir esa misma noche. Y además, las clases no comienzan a las12:00 como pasaba en la Universidad.

Cómo solucionarlo

La mejor forma de combatir un descanso irregular, es mantener una rutina de descanso que perdure en el tiempo. Aunque de ningún modo significa despertar a las 5:00 am durante un fin de semana, pero no deberías dormir más que una hora de lo normal. Al considerar tiempo adecuado de sueño en el fin de semana, nos aseguramos de no odiar a nuestro yo interior cuando llegue la mañana del lunes. Y si es absolutamente necesario descansar en la mitad de la jornada, o luego de un intenso día de trabajo, no retrasar la alarma más de 20 minutos es fundamental; porque cada minuto extra luego de ese límite nos afectará para poder descansar a la hora que nuestro cuerpo está acostumbrado.

Hábitos de alimentación irregulares

desorden comida

Ya que nos vamos a la cama con hambre o muy satisfechos, ninguna de esas opciones conduce a una buena noche de descanso. Obviamente, si el estómago ruge por comida; no es recomendable ignorarlo. Por el otro lado, sin embargo, si comemos snacks o meriendas durante la tarde, que tengan mucha azúcar o mucha sal; es altamente probable sentir malestar o incomodidad justo antes de ir a dormir. Y en el peor de los casos con una ingesta abudante, nos vamos a despertar para ir al baño en la mitad de la noche.

Cómo solucionarlo

Si hemos de comer antes de ir a la cama, es recomendable hacerlo al menos una hora antes de dormir. Pero debemos ser cuidadosos con la comida que escogemos. Ignorar las donas de chocolate y optar por una fruta, ensalada o snack más saludable es lo más recomendable. Y mientras más liviano, mejor; servirá para saciar el hambre y no provocar situaciones inesperadas.

Mucho “ruido”

bark dog

“Ruido”, en este caso, se refiere a estímulos externos que causan disrupción en nuestros patrones de sueño. Desde luces nocturnas, pasando por alarmas de autos, mascotas que ladran hasta una habitación desordenada; este ruido puede distraer la mente en diferentes formas y dificultar que podamos conciliar el sueño. Algunos de estos estímulos incluso, pueden mantener a la mente en estado de alerta; lo queramos o no. La anticipación de saber que tu gato va a saltar sobre la cama o que una bocina va a sonar a una hora específica; porque siempre ha ocurrido así en el lugar donde vives, inhibe a tu mente para “bajar la guardia”, lo que significa que no podrás quedarte dormido pronto.

Cómo solucionarlo

Existen muchas formas de lidiar con este tipo de distracciones y asegurarse que podamos tener una buena noche de descanso. Primero, las luces; apaga todo lo que parpadee o emita luz (computador, TV, celular, etc.) Segundo, combate el ruido externo con otro que sea constante; como el de un ventilador o aire acondicionado, al que tus oídos se puedan acostumbrar. Tercero, si tienes mascotas, cierra la puerta de tu habitación para que no puedan entrar a saltar a la cama o bajarse de ella en forma periódica. Finalmente, limpia el desorden que te molesta durante el día para que eso no te distraiga en el futuro.

Puede que conscientemente no te des cuenta, pero una vez que tu mente se deshaga de todo el “ruido” de tu entorno, podrás encontrar la paz mental y con esto, lograr concentrarte y trabajar mejor.

Para esta noche, ¡que tengas un descanso de calidad!

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Autor: Matt Duczeminski Artículo original Traducido por Cristian Estrada